La presión arterial se considera controlada si los valores son menores a 140/90 mmHg.
Esto que parece simple, tiene dos consideraciones muy importantes:
- Los valores deben estar por debajo de 140/90 mmHg, SIEMPRE (si dormiste poco, después del asado, en condiciones de estrés o ante emociones).
- AMBOS valores deben estar bajos: la presión máxima o sistólica debe ser menor de 140 y además la diastólica o mínima, menor a 90 mmHg. Algunos pacientes en la consulta cuentan que “tienen la presión bien, pero la mínima alta”.
¿Cómo podés controlar tu presión?
Existen diferentes estrategias para cada persona y no siempre resultan tener la misma eficacia en todos.
No es raro encontrarnos en el consultorio con historias de que una mujer decidió automedicarse con “lo que toma el marido y a ella no le resulto”.
Es por eso que es necesario que hagas una consulta si tu presión arterial no está bajo control. Ya sea porque sos un hipertenso “nuevo” o porque ante situaciones determinadas la presión “se descontrolo”, lo ideal es diagnosticar qué esta pasando y corregir.