En un estudio llevado a cabo en la ciudad de San Pablo, Brasil, más del 90% de los ejecutivos y empresarios encuestados previo a la realización de un control anual de salud, manifestaron que su estado de salud era bueno o muy bueno. En la muestra sin embargo, 2.4% tenía diabetes, 12.4% un riesgo al menos moderado de desarrollar enfermedad cardiovascular y el 48% tenía un perímetro de cintura aumentado.
El optimismo que caracteriza a algunos de los ejecutivos puede afectar la percepción sobre su salud, al punto que aún aquellos que se conocen portadores de factores de riesgo, como hipertensión arterial o colesterol elevado, declaman “estoy muy bien, con algo de estrés, aunque siempre se puede estar mejor”.
Para objetivar cuál es el estado de salud y, aún más importante, para identificar qué medidas preventivas se pueden tomar, es necesario realizar una evaluación de riesgo cardiovascular.
Además, es recomendable,
- No saltear comidas, en especial el almuerzo.
- Cenar al menos dos horas antes de acostarse, eligiendo un menú ligero, que contribuye en gran medida a dormir bien por la noche.
- Reservar en la agenda un espacio definido e inamovible para realizar actividad física.
- Aprender que los pequeños pasos, son en sí un cambio, sin pretender realizar cambios de hábitos que luego sean insostenibles en el tiempo.